Es difícil encontrar un periodista en este país que, apenas superada la barrera de los cincuenta años, haya estado presente sucesivamente en más de media docena de Juegos Olímpicos, de Mundiales y de Eurocopas de fútbol, además de en dos docenas de finales de Champions y diecinueve Vueltas Ciclistas a España.
Tras treinta años en la Cadena SER, y ahora en la Cadena COPE y en Cuatro, Manolo Lama se ha convertido en el periodista de confianza para los aficionados al deporte de nuestro país. Un «animal televisivo» que a las horas del mediodía se nos ha hecho tan indispensable como el postre o como una cañita bien tirada con aceitunas, en cualquier bar de su Cabra querida.